Bélgica se posiciona en contra del dsm, apostando por un cambio de paradigma definitivo en salud mental.
El Superior Health Copuncil de Bélgica (SHC) señala que las herramientas más utilizadas para diagnosticar problemas de salud mental (el Manual Diagnóstico y Estadístico de los Trastornos Mentales (DSM), o el Manual Internacional Clasificación de Enfermedades y Problemas de Salud Relacionados (CIE)) plantean varios problemas y recomienda que se utilicen con precaución y que las categorías del DSM no estén en el centro de planificación de cuidados.
Desde un punto de vista epistemológico, las clasificaciones se basan en el supuesto de que trastornos ocurren naturalmente, y que sus designaciones reflejan distinciones objetivas entre diferentes problemas, que no es el caso. Los límites entre las personas con una enfermedad y aquellos que están libres de ella son más dimensionales que categóricos.
A nivel organizacional, el SHC plantea la cuestión de la función de diagnóstico clasificaciones, que tienden a legitimar una estructura basada en un modelo biomédico y a proteger a la psiquiatría de las presiones del cambio, mientras que la atención de la salud mental se encuentra en un estado de cambio constante.
Por otro lado, este enfoque biomédico no reduce, como se esperaba, el estigma y la discriminación de los pacientes en la atención de la salud mental.
En Bélgica, las autoridades otorgan a las partes interesadas y organizaciones un amplio margen de libertad para utilizan estos sistemas, principalmente utilizados con fines de registro (MPD).
A nivel clínico, las clasificaciones no brindan una imagen de los síntomas, las necesidades de manejo y pronóstico porque carecen de validez, confiabilidad y poder predictivo. Por otro lado, no responden a nuevas concepciones de salud, definidas por la capacidad de adaptación, a pesar de los obstáculos biopsicosociales. Es más útil, señalan, entender la combinación de factores que contribuyen a causar y mantener los síntomas que identificar una categoría.
Un enfoque basado en la recuperación (clínica, personal y social) contextualiza mejor los síntomas y adapta las intervenciones de acuerdo con los valores, afinidades y objetivos de los pacientes, trabajando en estrecha colaboración con ellos.
Aquí puedes acceder al texto completo: DSM (5): the use and status of diagnosis and classification of mental health problems
Aída de Vicente y Silvia Berdullas resumen la noticia en Infocop. Aquí puedes leerlas
4ª edición de LISBON INTERNATIONAL LEARNING PROGRAM MENTAL HEALTH POLICY AND SERVICES. 2022 /2023 · Lisbon- Portugal
Aquí puedes acceder al programa
Estamos preparando un recorrido por las publicaciones, en diversos formatos, que más han despertado nuestro interés desde que la pandemia por la COVID-19 apareció. Pensamos en textos que aportan luz sobre las condiciones de vida, la desigualdad, las múltiples crisis que se superponen, la respuesta sanitaria, social. Textos que nos ayuden a entender el presente y vislumbrar futuros posibles.
Un anticipo:
La peste en tiempos de COVID-19, de Ana Solís
La Asociación Española de Neurospiquiatria (AEN-PSM), en defensa del modelo de Trieste
El ejemplo de Trieste, cuyos servicios comunitarios han recibido un reconocimiento universal, vive hoy momentos delicados. Una psiquiatría tan vulgar como la dominante en la actualidad no podía seguir tolerando pasivamente que un centro de referencia mundial demostrara abiertamente que hay otra forma de trabajar que no encaja en su breviario. Por eso vuelven a intentarlo. Se trata de borrar ese incómodo testimonio, por bien de la buena conciencia y la comodidad de sus gentes, simpatizantes y afiliados. En el siglo XIX, los psiquiatras críticos se quejaban de la escasa atención que se prestaba a los establecimientos de Gheel, abiertos e integrados en la sociedad, mientras que hoy nos quejamos de que Trieste quiera ser borrado del mapa de la salud mental y se nos prive de ese espejo donde todos nos miramos: unos para intentar seguir su camino y otros para derrocarlo
Aquí puedes leer el comunicado
Sobre el desmantelamiento de Trieste, escribe Benedetto Saraceno:
La experiencia y el modelo de Trieste y la región de Friuli Venezia Giulia, que allanaron el camino para la reforma psiquiátrica italiana y el cierre de los hospitales psiquiátricos, representan un punto de referencia fundamental para la salud mental comunitaria y para los servicios basados en los derechos y centrados en las personas, como se reconoce por la OMS. Por estos motivos, apoyamos todos los esfuerzos para mantener y desarrollar este sistema de servicios, a los operadores y gestores que se han formado en él, a los ciudadanos a los que cuida y apoya. Rechazamos cualquier intento de desacreditar, degradar, empobrecer y desmantelar este sistema a través de la explotación política e ideológica, el abuso de poderes de designación y dirección, la interrupción de la continuidad de la gestión del servicio y el recorte de recursos humanos, económicos e instrumentales.
Hacemos un llamado a las autoridades responsables de las políticas de salud nacionales y locales a cuidar y apoyar la continuidad de estas experiencias y fortalecer su acción, a través de elecciones adecuadas que premien el compromiso de quienes se comprometieron en los últimos años en el trabajo concreto y desarrollo de estos servicios, y garantizar los recursos adecuados para la atención de la salud mental y la calidad de vida de los ciudadanos.
Agradeceremos su firma de la carta adjunta (Si quieres que enviemos tu firma, escribe un correo con tu nombre y apellidos a Esta dirección de correo electrónico está siendo protegida contra los robots de spam. Necesita tener JavaScript habilitado para poder verlo. con el asunto "apoyo Trieste")
Benedetto Saraceno, MD, MPH, FRCPsych (Hon)
Secretary General
Lisbon Institute of Global Mental Health
CEDOC/NOVA MEDICAL SCHOOL
Rua do Instituto Bacteriológico, 5, Edifício Amarelo | 1150-190 Lisboa